Ada Menéndez y Rafael Luna, con la música de Aruná, en Poesía para Perdidos, el 28 de enero

Comenzamos este nuevo año con el ciclo Poesía para Perdidos, ciclo organizado por la Asociación Aragonesa de Escritores en colaboración con La Campana de los Perdidos, en el que un sábado de cada mes dos poetas, pertenecientes o no a la asociación,  leerán sus poemas mientras un grupo musical pondrá en broche al evento.

El próximo día 28 de enero, a las 22 horas, nos deleitarán con sus versos:

RAFAEL LUNA GÓMEZ


Soy escoria que entrega su alma a quien quiere,

su dueña guarda la llave sorda y muda,

(el sollozo que está cosido asu sombra),
cuchilla con la queme hiere en la duda.
Es cierto, no deberia amar tanato, duele.
Creo levitar poseído por poetas
que alimentan mi alma; quiero que se cuele:

mi voz es de quien la quiere tomar, poeta.

 

ADA MENÉNDEZ

Nació en Gijón (Asturias, España) en 1972 y reside en Madrid. Redactora de la revista digital Globalízate, ha publicado artículos y entrevistas de carácter social en diversos medios de comunicación digitales (Rebelión, Diario del Henares, Nodo50, Madrid Digital, Canal Solidario, etc.). Es miembro del colectivo Poetas del Mundo y de la Red de Arte Joven de la Comunidad de Madrid.En el 2006, obtuvo el Primer Premio del XXXII Certamen Literario Jóvenes Escritores «José María Franco Delgado» (Cádiz), fue segunda finalista del Certamen de Microrelatos de la Cadena Ser y finalista en el de microrelatos de Radio Onda Madrid.
Poemas y relatos suyos han sido publicados en los libros Gotas de mercurio (varios autores – 2006); Arena en los zapatos (varios autores – 2007) y en La vida es un bar en Malasaña (varios autores, Editorial Amargord – 2007).
ARUNA

Aruná nace a principios de 2010, fruto de la unión de músicos cuyas trayectorias han sido siempre distintas y lejanas, finalmente encontrándose en un punto donde deciden de una vez por todas crear música en conjunto y sin un patrón musical fijo a seguir.
Dejados llevar por sus sentimientos más ocultos y dándoles forma a través de su música, Aruná no duda en tener como primer objetivo intentar transmitir a la gente sus dudas, penas, alegrías y sueños.
Siempre impredecibles y con mucho camino aún por delante, la historia de Aruná será escrita por todos aquellos que quieran dejarse llevar por su mundo, siempre acogedor y envolvente.

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